Lo soñé en un ensayo sobre la ceguera, en exterminio 1 y 2 en soy legenda más de 8 veces, en las intermitencias de la muerte, en resident evil, lo soñé fascinante, la ciencia ficción mezclada con un estallido de psicología de personajes, la repercusión económica, religiosa, política, imposible…Ahora lo estoy viviendo y parece un sueño. Despierto esperando no encontrarme bajo los síntomas de la reina influenza, la porcina, la que nos mantiene enmascarados, a la defensiva pero a la vez con un halo de autocompasión por nuestros hermanitos, ahora más que nunca parecemos parte de una familia, en donde el sentido fraternal se asoma por unos ojos sin expresión sobre un tapabocas…hacen falta las muecas, los dientes, la nariz…la personalidad.
Momentos de pánico e impotencia…de desesperación, de risa desatada, de bromas, de incertidumbre...el temblor fue el único capaz de quitarnos apenas por unos segundos la gripe mundial de la cabeza.
Nunca pensé tanto en un novio como en la propia influenza…encuentro magníficos los verdades ocultas detrás de su propagación, la fuerza de un microscópico virus, su velocidad…misterioso Apocalipsis.
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